El ejército romano, respetado, temido y tantas veces imitado ha sido la seña de identidad primero de la república y más tarde del imperio que surgió de una ciudad que llegó a ser dueña del mundo.
Orden, formación y férrea disciplina definen a la máquina militar más perfecta de la antigüedad. Esto no seria posible sin una organización militar que podia actuar tanto como elemento punitivo, conquistador, constructor, o simplemente como guardián de unas fronteras siempre peligrosas y bajo tensión.
Es cierto que contó con grandes estrategas y unos generales brillantes a lo largo de su historia, pero la base de sus triunfos estaba tanto en el soldado raso como en sus suboficiales, sobre todo los temidos y admirados centuriones.
La sensación de pertenencia al grupo y el orgullo debido a los logros conseguidos fueron suficientes para mantener en el tiempo el dominio que los llevará a ser la potencia dominante en el Mediterráneo.
La tecnología ha sido muy importante en esta situación, asi como los aspectos sicológicos. La ciencia marcial es llevada a su máxima expresión. Grandes cambios en el material utilizado ocurrieron desde la época primigenia hasta el bajo imperio. Un legionario de César no se parecia en nada a uno de Trajano. Pero la reputación se mantuvo a pesar del tiempo transcurrido.
La culpable fue la legión como unidad básica. Unas tuvieron una vida breve y otras una larga existencia. El deterioro ya se manifestó ante los coetáneos del ejército imperial en horas bajas.
Gildas y otros son muy críticos con su propio pueblo. Roma es pagana ya , pero es portadora de la civilización e ilumina la oscuridad cultural de los britanos.
El orden y disciplina de las legiones son cualidades que destacan en este asunto.
El fracaso de la defensa fronteriza ante los invasores bárbaros en la isla británica ya era evidente en la época de Gildas. Se nota en el tono de sus escritos, preñados de amargura, debiendo además modificar y explicar el bajo concepto que tenia de los guerreros germanos.
Tampoco era consecuente seguir ensalzando el orden y disciplina de las legiones. Esto pertenecía ya al pasado.
La Historia de Jordanes es otro pasaje que muestra la decadencia y se refiere a la batalla de los Campos Catalaúnicos, donde los hunos amenazaban la Galia. Atila se burla de los romanos. Para el solo los visigodos eran rivales. Esto demuestra la gravedad de la situación.
Los tratadistas militares posteriores como Mauricio reconocen los problemas del ejército especialmente en el caso de la infanteria. El entrenamiento ya no es el adecuado. Era peor el caso de Occidente. En Oriente la caballería adquiere protagonismo antes.
En la Edad Media aún se aplica el arte de la guerra romano. Los nuevos monarcas de los reinos bárbaros reclaman una afinidad a nivel de instituciones con la antigua Roma. Pero las condiciones del momento no permiten el reclamar la herencia de la ciencia bélica.
El imperio franco del 800 no tiene nada en común con las legiones en la estructura militar. Las levas feudales conforman un ejército más sencillo y reducido que el romano.
El legado de la Roma militar sigue existiendo como código teórico nen la caballeria, pero poco más.
Vegecio con su tratado militar alarga la sombra del legado romano durante siglos. Ejercicios y entrenamiento eran lo más valorado. Como sobrellevar los asedios era una de las secciones más utilizadas. Has la aparición de los cañones fue muy efectivo.
Orden cerrado,disciplina severa y uniformes estan vigentes plenamente en la Edad Moderna. La lectura de la Guerra de las Galias de Julio César era de uso común entre los generales modernos.
En la Edad Contemporánea (desde 1789 ) las revoluciones marcan la época y vuelven conceptos dela Roma clásica. Las figuras de este tiempo siguen devorando los tratados y libros de tácticas de los autores romanos.
Los militares comienzan a generar ciencia e ingenieria en su campo a niveles nunca vistos. Napoleón Bonaparte recupera símbolos y armas de la Roma clásica ya que los ejércitos vuelven a ser similares en número a los de la antigüedad. El águila de Cayo Mario vuelve a volar.
Aún hoy en dia los autores romanos son estudiados en las academias militares, los tamaños de las unidades, los lemas en latín, la figura fundamental del centurión , todo es efecto de la fascinación que sigue produciendo el ejército que durante 800 años dominó el mundo conocido. Hasta 1914 y la guerra de trincheras su vigencia fue extraordinaria.
